Esta fábula pertenece a cómo acostumbrarse y climatizarse a los cambios que no se pueden controlar. Estos cambios pueden ser del medio ambiente, trabajo, relaciones, o cualquiera cosa que se convierte en algo diferente. En la fábula, la cosa que cambia es el queso. Hay cuatro personajes: Hem, Haw, y dos ratones. Los ratones cambiaron sus hábitos cuando el queso se acabó, y buscaron, y por fin encontraron, un nuevo queso que pudieron disfrutar de. Mientras los ratones exploraron el laberinto, donde los cuatro vivían, Hem y Haw se quedaron en el mismo sitio, tratando de adivinar cómo era que no pudieron disfrutar del queso viejo que se había acabado. Como no se mudaron, se pusieron débiles y taciturnos, hasta que Hem decidió que necesitaba irse. Trató de llevar a Haw con él en una búsqueda de un queso nuevo, pero Haw no quisiera irse del lugar viejo.
Por fin, Haw experimentó mucho más de la vida, que era simbolizado por el laberinto, y acabó disfrutando de un queso más rico que el queso que disfrutaba de antes. Hem también aprende que no puede traer a las personas, como Haw, quienes no les apetecen dejar de un modo de vivir, aunque la vida allí ya se ha cambiado. El lector no sabe si Haw encuentre el nuevo queso.
Esta fábula tiene que ser con todos partes de la vida, especialmente para las personas quienes les cuestan más cambiarse. Disfruté de leerla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario